Desde la aprobación de la ley
33/2011 coexisten dos figuras de psicólogos profesionales con competencias en
el ámbito sanitario: el psicólogo especialista en psicología clínica, que es
formado a través del sistema de Psicólogo Interno Residente (PIR) y la de
Psicólogo General Sanitario, formado a través del máster oficial de Psicología
General Sanitaria (PGS).
Esto genera un cierto
desconcierto derivado principalmente de las diferentes funciones profesionales
atribuidas a los mismos en el ámbito laboral previsto donde pueden ejercer su
actividad los futuros profesionales, mientras que las competencias del
Especialista están recogidas
en la LOPS y en
la Orden SAS 1620/2009 en las que se define el
programa de formación del especialista en Psicologia Clínica, para las del PGS no hay más
información que la reflejada en la LGSP. Así, los psicólogos clínicos harían
diagnóstico y tratamiento de trastornos mentales mientras que los psicólogos
sanitarios, harán evaluación y prevención sobre aspectos que influyen estado general de la
salud, siempre que dichas actividades no requieran una atención especializada.
Para acceder a ambas formaciones
es necesario ser licenciado o graduado en Psicología, pero para acceder al
máster además hay que tener la mención en clínica.
El máster tiene una duración de
dos años y el tipo de formación es universitaria, mientras que el PIR tiene una
duración de cuatro años y su tipo de formación es hospitalaria y extrahospitalaria en la el circuito público de salud mental.
Para acceder a Psicólogo General
Sanitario, hay que realizar un máster en Psicología Sanitaría, cuyos criterios
son definidos por cada universidad, mientras que para Psicólogo Especialista en
Psicología Clínica se accede via PIR, a través de un examen y el expediente
académico en una relación de 90% examen y 10% expediente.
En 2011 fueron ofertadas 141
plazas de PIR, en el 2012, 128, sin embargo las plazas de Psicólogo General
Sanitario aún están por definir. De las plazas ofertadas en PIR, se presentaron
3693 personas por lo que la ratio real fue una plaza para cada 26 aspirantes,
de PGS no se tienen datos.
El PGS y PIR, es que los PGS no son equiparables. Con el PIR se
puede trabajar en el ámbito clínico tanto en instituciones públicas como en
privadas mientras que con el MGS solo se podría trabajar en el ámbito privado,
teniendo en cuenta que el máster te habilita profesionalmente pero no te
especializa como el PIR. El psicólogo
especialista en clínica tiene la categoría de FACULTATIVO, el PGS no.
Las retribuciones que
recibe un Psicólogo Especialista en Psicología Clínica son las propias de la
escala de facultativos mientras que las del Psicólogo General Sanitario son las
correspondientes a otros cuerpos.
Haciendo el PIR se obtiene la especialidad en Psicología
Clínica, que actualmente es la única especialidad reconocida en psicología, con
la que se adquieren conocimientos generales y formación específica en áreas
como neuropsicología o drogodependencia.
En conclusión, los
clínicos harán diagnóstico y tratamiento
de los trastornos mentales y los psicólogos sanitarios harán evaluación,
prevención y promoción del estado general de
salud.